El Personal extranjero compuesto por una treintena de personas, en su mayoría de origen belga– tiene en el puerto de Paysandú su base de operaciones y se hospeda en un hotel sanducero durante el mes y medio en que se extenderá el trabajo de apertura del canal de Casa Blanca.
Estos operadores de la draga cortadora Kaerius y de la infraestructura de apoyo para la tarea encomendada por la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU) están trabajando durante las 24 horas, en dos turnos de 12 horas. La salida del primer turno es a las 6 del puerto sanducero y retorno a las 18 y a la inversa en el segundo, destacó a EL TELEGRAFO el administrador del puerto de Paysandú, Jorge Granja.-Además, dijo que, en este momento, la única actividad que se registra en el puerto es por la draga y por el movimiento que genera la empresa. En tanto, se espera para el mes próximo el arribo de un cargamento de azúcar crudo para su refinado en la planta de Azucarlito.Asimismo, está funcionando una oficina de Jan de Nul en el puerto y se realiza un traslado de repuestos y materiales en pontones que amarran y también por carretera. Estos contenedores son dispuestos en un predio ajeno al recinto portuario, ya que la empresa encaró esta forma de trabajo para reducir los costos de operar con contenedores en el puerto, ante disposiciones legales sobre cantidad mínima de jornales.-Granja expuso que “los pontones vienen con mercadería e incluso tenemos el embarque y desembarque de los tripulantes de la draga a las 6 y las 18, donde suben y bajan de la lancha que los transporta hasta el lugar donde está trabajando la draga. Se cumplen 12 horas por turno, para cubrir las 24 horas de jornada de trabajo; felizmente no hemos tenido inconvenientes”.“Este jueves, precisamente, durante dos horas en la mañana, se desarrolla un simulacro de siniestro en la draga, con un herido, para ajustar las respuestas ante emergencias”. Tienen en cuenta “la importancia de los tiempos, cómo se maneja la emergencia médica móvil”, expresó el administrador del puerto sanducero.“Son 15 tripulantes en cada viaje” y se alojan en un hotel de la capital sanducera. “En los pontones, se traen los repuestos para la draga y materiales, discos de corte, caños para la succión, entre una diversidad de materiales, sin olvidar combustible y otras insumos”, amplió. “La empresa tiene su base de operaciones y logística en Paysandú, en tanto hay contenedores que han quedado en el puerto de Fray Bentos, por un tema de costos de la empresa. Lo que se necesita se trae en los pontones o por vía terrestre”, explicó.Concluyó que es así porque, en el caso de la estiba, por un decreto del Poder Ejecutivo, “se adjudicó a la bolsa de trabajo, en el caso de la tarea de operativa con contenedores, el pago mínimo es de 13 jornales, aunque se trabaje menos que ese período. Ello planteaba a la empresa un pago considerado oneroso, ante los requerimientos reales, por lo que se resolvió dejar algunos contenedores en Fray Bentos y transportar otros hacia un predio cercano en Paysandú”- EL TELEGRAFO
