El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, promoverá hoy su plan de infraestructura durante una visita a la ciudad de Cincinnati, Ohio, donde pondrá énfasis en el sistema de vías navegables interiores. La secretaria de prensa adjunta de la Casa Blanca, Sarah Sanders, informó que el viaje a ese territorio del noreste del país se enfocará en la reparación de 12 mil millas (unos 19 mil 312 kilómetros) que permiten un comercio valorado en 230 mil millones de dólares anuales. Según la administración del republicano, los sistemas de esclusas y represas se desmoronan porque el Gobierno federal no puede financiar las reparaciones críticas que necesitan. La presidencia informó ayer que el nuevo enfoque del gobernante capacitará a los gobiernos estatales y locales para que hagan las mejoras necesarias, en medio de una semana que Trump decretó como ‘dedicada a abordar la desmoronada infraestructura de la nación’. Para ello empezó hace dos días con la presentación de un plan encaminado a privatizar el sistema de control de tráfico aéreo, al que calificó de desactualizado y poco funcional en la actualidad. Según la propuesta, que será valorada en el Congreso, el control de esa área sería operado por una corporación no gubernamental, sin fines de lucro y autofinanciada, mientras se eliminarían todos los impuestos actualmente pagados para apoyar el sistema y se permitiría a la nueva entidad imponer tarifas de usuario. En tanto, la Casa Blanca informó que mañana habrá una sesión de escucha de gobernadores y alcaldes para asegurar que las políticas de la administración en materia de infraestructura se alineen con las necesidades específicas de los territorios. Un día después Trump firmará una orden ejecutiva para mejorar la eficiencia y oportunidad de los proyectos de infraestructura, dirigida a reducir el tiempo que toma aprobar una obra importante. La semana pasada un funcionario de la Casa Blanca se reunió con representantes de más de una docena de grupos conservadores con el objetivo de interesarlos en el plan de infraestructura de un billón de dólares (un millón de millones) que defiende el presidente. Algunas de esas agrupaciones se habían mostrado escépticas acerca del gasto masivo en infraestructura federal, especialmente si era impulsado por el déficit, pero se sintieron alentados al ver el resumen del plan incluido en la propuesta presupuestaria que Trump envió al legislativo. Ese documento establece que se requerían solo 200 mil millones de dólares en gasto federal directo durante la próxima década, junto con incentivos para fomentar la financiación estatal y privada. http://paraguayfluvial.com
