Un prematuro desgaste de los water jets axiales del catamarán “Francisco” para el tiempo que lleva en servicio, ha motivado su varada en el astillero Tandanor, en Buenos Aires, para realizar modificaciones en los sistemas con la asistencia técnica de personal de Wärtsila desplazado desde Finlandia.
Debido a las limitaciones del astillero, los trabajos se realizan en la plataforma del syncrolift. El hecho de que este buque mantenga una alta velocidad de 50 nudos, ha hecho que sea un banco de pruebas en algunos sistemas de potencia.
Propiedad de Buquebús, el citado buque es un emblema en la conexión entre Buenos Aires y Montevideo, en la que invierte dos horas y media. Entró en servicio en 2012 bautizado en homenaje al Papa Francisco y es el primero en el mundo propulsado por dos turbinas de gas General Electric LM 2500, que desarrollan una potencia de 25 MW cada una y puede alcanzar una velocidad máxima de 58 nudos.
Fotos: Raúl Tavernelli
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