93º Aniversario de la Aviación Naval

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El pasado 7 de febrero se llevó a cabo la ceremonia por el 93º Aniversario de la Aviación Naval en las instalaciones de la Base Aeronaval Nº 2 “CC Carlos A. Curbelo”.

La ceremonia contó con la presencia del Señor Comandante en Jefe de la Armada, Almirante Carlos Abilleira, Señor Comandante de la Flota, Contralmirante Ricardo Della Santa, Señor Director General de Personal Naval, Capitán de Navío (CG) Juan Retamoso, Autoridades Diplomáticas, Navales y Departamentales, Personal Superior y Subalterno de la Aviación Naval, en actividad y Retirados.

 

          

 

            Durante la sencilla y emotiva ceremonia, se hizo entrega de los correspondientes diplomas al Personal Subalterno recientemente egresados de la Escuela de Aviación Naval.

 

            

 

              Finalizando la ceremonia el Sr. Comandante de la Aviación Naval, CN (CG) Pablo Martínez Cantero, hizo uso de la palabra, recordando la importancia para el país de la Aviación Naval en estos 93 años de existencia y de los retos a los que se enfrenta en las condiciones de hoy en día:

 

 

 

    “La Aviación Naval se complace en darles una calurosa y fraternal bienvenida a la conmemoración del 93 aniversario.

 

 

 

     El 7 de febrero de 1925 nacía el Servicio Aeronáutico de la Armada, sirviendo desde entonces a la Patria y a la Armada, como componente aeronaval de la misma.

 

 

 

     Hoy en día la Aviación Naval -junto a la Fuerza de Mar y el Cuerpo de Fusileros Navales- conforma uno de los tres elementos básicos del Comando de la Flota, brindando el apoyo aéreo necesario para las operaciones que la Armada Nacional realiza como parte de su misión y en defensa de la soberanía nacional. Lo hace como un apoyo y como un integrante más de la infantería de marina, lo hace desde la policía marítima y la salvaguarda de la vida humana en el mar y por supuesto como proyección militar del poder naval, siendo parte indivisible del sistema de armas, de sensores y de alerta temprana de la fuerza de mar.

 

 

 

     Han pasado 93 años de existencia y continuamos en el camino trazado por nuestros antecesores, trabajando a fin de cumplir con nuestras obligaciones, manteniendo nuestras capacidades actuales pero también siendo consciente que la generación de nuevas capacidades es la clave del futuro.

 

 

 

     En estos 93 años, la Aviación Naval ha crecido de una fuerza marginal que satisfacía un papel en la estrategia militar del país, a la fuerza versátil que se ha ido adaptando con el correr de las décadas a las necesidades reales de la República de acuerdo a la situación coyuntural internacional, a las nuevas amenazas y a los requerimientos de los acuerdos internacionales ratificados por nuestro país.

 

 

 

     En octubre del año pasado el último helicóptero Bolkow dejaba de volar para sumarse a la lista de aeronave fuera de servicio. La Aviación Naval perdía entre otras, su capacidad para formar a sus propios pilotos de helicópteros….pero al igual que el año pasado la ayuda vino desde tierras extranjeras, esta vez desde la República Argentina desde el Ejército Argentino. Es por eso que quisiera agradecer toda la gestión realizada por el Sr. Agregado Militar a la embajada Argentina en nuestro país, Coronel Fernando Baretto para que un piloto naval se formara en la Escuela de vuelo del Ejército Argentino como piloto de helicóptero, comenzando en el día de mañana el curso correspondiente. Coronel Baretto muchísimas gracias.

 

 

 

     Hace exactamente un año atrás hacía referencia que el país sabiendo lo que podía esperar de una Aviación Naval eficiente en algún momento admitiría gustosamente su contribución para ofrecerles a los pilotos navales un panorama no tan estéril; es así que a comienzo del presente año como consecuencia de las gestiones realizadas por el Comando General de la Armada y por el Ministerio de Defensa, se autorizó por parte del Ministerio de Economía el gasto correspondiente para la adquisición de dos helicópteros Augusta Bell 412 que pertenecieron en su momento a la guardia costera italiana. Con esta futura adquisición se recuperarán capacidades que en su momento se vislumbraban como perdidas y nos permitirá dar un salto cuantitativo y cualitativo que a su vez nos permitirá desarrollar nuestras tareas en forma más eficiente y segura.

 

   

 

2017 fue un año arduo y complicado para la Aviación Naval como consecuencia de esa escasez de medios disponibles para cumplir en forma eficiente las tareas propias y de las ordenadas por el Mando Naval, pero tengo que agradecer a toda….absolutamente a toda la dotación del este Comando desde quien me sigue en la derecha hasta el último marinero egresado de la escuela de Aviación Naval, por el esmero y el sacrificio que significó mantener las únicas tres aeronaves que se tenían operativas el mayor tiempo posible en orden de vuelo con sus respectivas tripulaciones calificadas.

 

 

 

     Mantenimiento General de la Aviación Naval…. mi mayor reconocimiento por lograr mantener en orden de vuelo el mayor tiempo posible a la única aeronave de patrulla marítima A-872: 306 días en orden de vuelo…..al único helicóptero multipropósito A-065: 200 días en orden de vuelo hasta el 31 de octubre  fecha que por una inspección calendaria quedara fuera de orden de vuelo hasta el día de hoy…..a la única aeronave de instrucción A-272: 302 días en orden de vuelo.

 

   

 

     Grupo de Escuadrones de la Aviación Naval y Escuela de Aviación Naval….mi reconocimiento por lograr mantener las capacidades operativas de este Comando intactas contando únicamente con una aeronave de cada tipo para ello.

 

 

 

     Base Aeronaval N°2….mi reconocimiento por ese apoyo silencioso que le brinda a las demás unidades con asiento en el área naval laguna del sauce para que estas puedan cumplir con la misión asignada.

 

 

    

     En resumen, mi reconocimiento a la actuación de todos y cada uno de los integrantes de este Comando por el esfuerzo y el aporte diario que realizan para lograr cumplir con la misión y las tareas que nos asignan a pesar de todas las dificultades que encontramos día a día. Es por eso que los exhorto a continuar por este camino y a sacar a relucir la identidad que nos caracteriza como Aviadores Navales, a sacar a relucir la fortaleza y la moral inquebrantable que nos identifica como hombres de armas, y lo más importante a sentir orgullo de nuestro pasado, a comprometernos con el presente y a ser optimistas de nuestro futuro”.

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