Un nuevo informe de la consultora marítima UMAS, Getting to Zero Coalition y Race to Zero encuentra que, si bien es posible que los combustibles escalables de cero emisiones representen el 5% de los combustibles para el transporte marítimo internacional para 2030 (el gran objetivo del transporte marítimo), la ventana de oportunidad se cerrará pronto y se requiere una acción rápida por parte de la industria. El informe, “Acción climática en el transporte marítimo, progreso hacia el avance del transporte marítimo en 2030”, presenta un panorama mixto cuando se trata de los principales desafíos del transporte marítimo de abastecimiento de combustibles de cero emisiones y despliegue de buques de cero emisiones.
Combustible y buques
Según el documento la producción de combustible de cero emisiones actualmente en proceso podría terminar cubriendo solo una cuarta parte necesaria para lograr el avance. Sin embargo, si más proyectos tienen éxito, la producción podría ser hasta el doble de lo necesario, incluso teniendo en cuenta las necesidades de combustible de otros sectores. En el caso de los buques, el panorama es menos halagüeño. A pesar de las órdenes de buques propulsados por metanol que acaparan los titulares, continuar con la trayectoria actual de pedidos podría significar la entrega de sólo una quinta parte de las naves necesarias para lograr el gran objetivo.
“En los últimos 12 meses se ha visto un cambio positivo en los esfuerzos de descarbonización marítima. Ahora es el momento de ver un fuerte progreso en términos de compromiso con los combustibles y el transporte de carbono cero por parte de la industria, de modo que se logre la rápida ampliación necesaria de estos combustibles en la combinación energética”, afirma el Dr. Domagoj Baresic, investigador asociado de la UCL y Consultor de la UMAS y autor principal del informe.
Es necesario acelerar las medidas
El progreso en materia de políticas es fundamental para permitir el necesario aumento de la oferta y la demanda. Se han logrado avances importantes con la adopción de una ambiciosa estrategia de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) por parte de la Organización Marítima Internacional (OMI), a la que seguirá en 2025 la adopción de medidas globales concretas para lograr los objetivos de la estrategia. “Con la revisión de la estrategia de la OMI sobre gases de efecto invernadero, la dirección que tomará la industria quedará clara. Especialmente en estos primeros años, debemos poder evaluar qué tan rápido avanzamos en esa dirección. Este informe muestra que la industria está progresando, pero aún es necesario acelerar las medidas”, afirma Jesse Fahnestock, director de proyectos del Foro Marítimo Mundial.
Camino a la COP28
El informe marca un hito importante en el camino hacia la COP28 que se realizará a fines de este año en Dubái. Además, evalúa el objetivo de avance del transporte marítimo frente a cinco palancas clave para el cambio: tecnología y suministro; finanzas; política; demanda; y la acción de la sociedad civil.
“La OMI ha liderado con ambición y ahora el sector marítimo está listo para reducir las emisiones e impulsar el crecimiento ‘verde’, particularmente para los países en desarrollo. Las naciones comerciales dominantes tienen una oportunidad monumental de recuperar nuestro estancado impulso climático intensificando los esfuerzos que los principales propietarios, operadores y fabricantes de buques ya han comenzado” dice S.E. Razan Al Mubarak, defensora de alto nivel sobre el clima de la ONU para la COP28. El informe indica que la financiación para lograr este gran avance va parcialmente por buen camino: el monto del transporte marítimo cubierto por los Principios Poseidón supera los US$200.000 millones y la alineación climática de estas inversiones ha mejorado del 4% al 6% en promedio ponderado. Queda por ver la capacidad de la industria para seguir mejorando la alineación a medida que las normativas se endurecen.