In Memorian

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ALEXIS AMERICO GARCIA IGLESIAS

Teniente de Navío (RN) (R)

 Ayer recibí la noticia que el Teniente de Navío (RN) (R) Alexis Américo García Iglesias, mi primer Oficial Instructor, mi Amigo, zarpó hacia el mar de la eternidad. Conocí al entonces Guardiamarina Alexis García el 7 de abril de 1967, en el Centro de Instrucción de Marina, el día que como Marinero de 2ª (RN) ingresé a la Armada Nacional.  Allí, y bajo su supervisión, los reclutas recibimos los primeros fundamentos de la formación naval.  Un año después, comenzamos a compartir actividades deportivas en el Club Nacional de Regatas, buscando a través del remo mantener la llama de la Reserva Naval.  El deporte nos volvió a unir meses después en un equipo totalmente amateur de basketball.

El febrero de 1969 ingresé a la Escuela Naval y por los siguientes años dejé de verlo.  Nos encontrábamos ocasionalmente en desfiles y paradas militares solamente, y todo nuestro contacto se limitaba al intercambio de saludos formales, como correspondía de un Alumno Aspirante a un Oficial.

En 1978 me integré al plantel docente de la Escuela Naval.  A sugerencia de la Jefatura de Cursos acudí previamente al Comando de Enseñanza Naval, donde el ya Alférez de Navío (RN) Alexis García, formalmente incorporado a la Armada, me introdujo en el mundo de la enseñanza por objetivos, método educativo que acababa de ser adoptado para las aulas navales.  Fueron varias jornadas de instrucción en las que mucho aprendí de él.

Nunca compartí destino con Alexis, pero el ejercicio de la docencia nos mantuvo unidos por décadas, en nuestro país y en el exterior, compartiendo seminarios o congresos en Argentina y Brasil, lo que nos brindó la oportunidad de sostener largas charlas que fueron fomentando y profundizando la amistad.  También, estando yo destinado en Washington DC, arribó a EEUU integrando una delegación de la Dirección General de Enseñanza Naval, ocasión que aproveché para alojarlo en mi casa durante dos noches.

Durante su carrera naval mucho bregó por dignificar y jerarquizar a la Reserva Naval, algo destratada por los mandos durante algún tiempo.  Un día, asumiendo que su ciclo estaba cumplido, decidió pasar a retiro y se alejó de la Armada.  Desde ese día, nuestros contactos fueron muy esporádicos, aunque la amistad permaneció.

Ayer mi Amigo Alexis García largó amarras del muelle terrenal y zarpó hacia el horizonte eterno, esa distante línea que se ve pero nunca se alcanza en esta vida.  No partió, solo se adelantó en la zarpada.  Al marchar, solo me resta desearle “…buenos vientos Amigo, y un pie de agua bajo la quilla, hasta el día que nos encontremos en el mar de la eternidad…”.

FRANCISCO VALIÑAS

Capitán de Navío (R)

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