Gran parte del sistema político coincidió en el Parlamento en que sería una salida de exportaciones estratégica . Ese puerto sacaría la producción boliviana, paraguaya y también del norte argentino. El gobierno y la oposición coincidieron el jueves 31 en una comisión del Senado sobre la necesidad de que Uruguay tenga un puerto oceánico en Rocha para habilitar que los grandes buques portacontenedores arriben a la región. Durante la sesión en la comisión Presupuesto anexada con la de Hacienda del Senado, el ministro de Transporte, José Luis Falero, aludió al tema del puerto de aguas profundas cuando anunció que la cartera llamará a licitación en el correr de este mes un tramo de la ruta 14 que va desde la Coronilla hasta Mercedes, que es de jurisdicción nacional. La obra abarca un tramo de unos 43 kilómetros. “Entonces, va a quedar arreglada una ruta vital que atraviesa todo el país. Comparto la preocupación (de la oposición). No solamente la compartimos, sino que entendemos que es indispensable (esa ruta) para el desarrollo del país y la conectividad con la posibilidad de abrir hacia el futuro el puerto de aguas profundas u otro” en la zona de Rocha”, dijo Falero. El 26 de octubre de 2021, en un evento organizado por la Academia Uruguaya de Geopolítica y Estrategia (AUGE) en el Parlamento, Falero también se refirió al puerto oceánico en Rocha. Señaló que está “convencido” de que la construcción de un puerto de aguas profundas en Uruguay “se va a terminar dando” y agregó que, para que esto suceda, “tiene que ampliarse la producción de nuestro país, en una mirada más amplia de lo tradicional”. Esto es, se necesita el arribo de una megaempresa que requiera los servicios de un puerto oceánico para complementar la salida de la producción uruguaya.
Falero opinó que “no es el Estado quien debe enfrentar o planificar este desarrollo, porque obviamente nuestro país está muy limitado en lo que hace a esa posibilidad. (…) Pero sí debe ser un socio importante de nuevas inversiones que visualicen a Uruguay en esta perspectiva a nivel mundial”, insistió el jerarca. Para la concreción de una iniciativa de esas dimensiones, dijo el ministro, se debe tener “una mirada hacia adentro de cómo llegar a esos puertos”, por lo que entiende necesario ampliar el desarrollo ferroviario a otras zonas del país. En la sesión de la Comisión, el senador de Cabildo Abierto, Guillermo Domenech, señaló que la ruta 14 tiene un enorme valor geopolítico porque atraviesa Uruguay de oeste a este y, en la actualidad, se divide en varios tramos. Tiene un trayecto de casi 500 kilómetros. “En el futuro de nuestro país está la construcción de un puerto de aguas profundas, seguramente en la zona de Rocha y es probable que en La Coronilla. Para Uruguay sería fundamental porque, en definitiva, es una especie de balcón sobre el Océano Atlántico”, dijo el parlamentario cabildante. Y agregó: “Hemos mirado mucho a Argentina poniendo nuestros ojos en Buenos Aires y, en realidad, ese país es otra cosa y para Uruguay y el centro de América sería muy importante un puerto de aguas profundas que le permita ser la salida del comercio boliviano, paraguayo y del centro norte argentino”. Domenech opinó que la construcción de un puerto de aguas profundas debe ser “un objetivo” que el sistema político tiene que fijarse para facilitar ese tránsito de mercaderías del centro de América hacia la costa uruguaya y consideró que la ruta 14 cumpliría un papel clave en ese sentido. Por su parte, el senador Daniel Caggiani (MPP) afirmó que, en términos generales, Uruguay tiene “un desafío muy importante” en mejorar los modos logísticos y, sobre todo, su interconexión para tratar de tener niveles más eficientes, porque está ubicado “en un lugar espectacular” del Cono Sur de América del Sur. “Sin duda, los problemas del hoy son los que tiene que atender el Ministerio de Transporte y es lo que le reclaman al ministro (Falero) cuando va a algún pueblito o a otro lugar, pero también hay que ver la forma de incluir en la agenda una visión un poco más estratégica del país”, afirmó el parlamentario frenteamplista. En tal sentido, agregó: “Creo que el puerto de aguas profundas y la necesidad de tener una vocación con una mirada más Atlántica todavía sigue siendo un debe, a pesar de los esfuerzos que se han hecho por parte de diferentes administraciones”. Caggiani recordó que más allá de que por ley ya esté establecido un puerto en la costa atlántica de Uruguay y una posible ubicación, “se necesita” inversión, carga y todo el “know how” (conocimiento) para poder desarrollar una terminal de ese tipo.
Vieja aspiración
Durante la administración de José Mujica (2010-2015) se llevaron a cabo estudios para construir un puerto de aguas profundas en la zona del Palenque en Rocha con el propósito de sacar la producción de la minera Arazatí. Al caerse los precios del hierro, la iniciativa portuaria -uno de los buques insignias del gobierno de Mujica- y el emprendimiento privado millonario quedó por el camino. El expresidente de la República, Luis Lacalle Herrera, quien promovió en su administración la llamada “Ley de Puertos” que modernizó la terminal montevideana y habilitó las concesiones a privados, defendió en 2012 también la necesidad de crear un puerto de aguas profundas. Lacalle Herrera expresó en un evento: “Creemos seriamente en la construcción de ese puerto, primero porque sale de ese chisporroteo o problema de jurisdicción con nadie. Es decir es un puerto nuestro frente al mar, franco y libre. En segundo, lugar las ventajas están dadas en cuanto a profundidad, para que podamos pensar mucho más allá de los gigantescos barcos que ya se están construyendo”. https://www.elpais.com.uy/
