El pasado 19 de abril, participé como asesor de gestión en una reunión que se desarrolló en el Viceconsulado de Brasil en Río Branco, sobre la “Agenda binacional de integración fronteriza Uruguay-Brasil”. En la reunión estuvieron presentes el vicecónsul, Aluisio Reinaldo Moura Silva, el vereador Cristiano Cardoso, de Jaguarão, el coordinador general de la Agenda, Rafael Leites, Marcia Barreto, los ediles de Cerro Largo, Geener Amaral de Río Branco y Santiago Álvarez Llambí, de Melo y el suscrito, donde se realizó un provechoso intercambio de ideas y ajuste de los estatutos de la Agenda Binacional. Esta Asociación Civil tiene una acción en la zona fronteriza con Brasil del este y noreste uruguayos y el sureste de Rio Grande do Sul en Brasil. La idea surgió hace un par de años entre residentes de la zona binacional y tiene estas características:
Es un impulso genuino que tiene apoyo, primero que nada, de las fuerzas vivas de cada departamento fronterizo y sus localidades, así como de los municipios brasileños, conformando entre todos un complejo de 30 ciudades y pueblos. Este grupo convoca y recibe adhesión y apoyo, en distintos grados, de las autoridades oficiales departamentales y nacionales, a medida que se realizan encuentros, foros, eventos y sobretodo mantiene una diaria comunicación de actividades, proyectos y realizaciones por medio de un Foro de WhatsApp. Somos más de un centenar de participantes de ambos países y la gran mayoría participa seria y activamente. La idea madre de esa iniciativa es el desarrollo de la región transfronteriza, en un ámbito de integración Uruguay-Brasil, en una zona que en ambos países está postergada, tanto en baja población, baja inversión y escasos rubros productivos, educativos, culturales, turísticos y de otras índoles, que son los que catalizan y dinamizan el empleo, el gasto, la afluencia de gente de otras zonas y, en definitiva, potencian la riqueza social y económica. El contacto es asiduo y se busca alternar la ocurrencia de eventos (Reina de la Integración, por ejemplo) o bien rutas gastronómicas, regatas en la laguna, ecoturismo, exposiciones culturales: literatura, teatro, danza, artesanía, audiovisuales temáticos o geográficos, etc., etc. No quedan atrás otros temas tan importantes a ambos países como: producción agrícola, ganadera, forestal y minera (calizas); medio ambiente a preservar: calidad de aguas fluviales y lacustres, flora y fauna nativa, pesca furtiva o extractiva, control de erosión de la costa, que avanza anualmente sin pausa; infraestructura en red vial, puentes y conectividad a internet; crecimiento en oferta educativa para los jóvenes en distintos niveles (ANEP, UTU, UTEC, UDELAR, Privados), y obviamente, una acción social a través de los clubes, asociaciones y entidades existentes, con destacada trayectoria en los distintos departamentos uruguayos y ciudades brasileñas del Estado de Rio Grande do Sul. Ya están los estatutos en ajustes con profesionales de ambos países, ya que será una asociación civil binacional y un organigrama de autoridades para una acción seria, pujante, transparente y participativa de los residentes de la zona, que son los actores y los primeros beneficiarios para derramar luego logros y ejemplo a zonas cercanas y al país todo, sea en Uruguay o en Brasil, y en ambos integrados.
¡Al trabajo y adelante!
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