Con una nueva conducción y frente a una competencia cada vez más agresiva por parte de Brasil y Argentina, el Puerto de Montevideo busca consolidar su liderazgo en el comercio regional mediante inversiones estratégicas, mejoras en infraestructura y mayor eficiencia operativa. Bajo la presidencia del ingeniero Pablo Genta, la Administración Nacional de Puertos (ANP) renovó su directorio en junio con la incorporación de Constante Mendiondo como vicepresidente y Jorge Gandini como director vocal por la oposición. Gandini aseguró que, pese a los desafíos actuales, el puerto tiene ventajas naturales clave como el calado profundo y el dragado a 14 metros, que lo posicionan por encima de varios competidores regionales.
Uno de los principales golpes recientes fue la pérdida de carga paraguaya por decisión de la naviera MSC, que redirigió parte del tráfico hacia terminales propias en Argentina. Aun así, Montevideo apuesta a proyectos futuros, como nuevas terminales para carga de krill antártico y graneles líquidos.
“La competencia es feroz, no solo con Buenos Aires, sino también con puertos brasileños como Santos y Río de Janeiro. Pero tenemos condiciones estratégicas para mantenernos en la pelea”, afirmó Gandini.
Además de modernizar sus instalaciones, el puerto trabaja en reducir tiempos de espera y reforzar controles de seguridad. También busca fortalecer su conectividad terrestre y ferroviaria para mejorar la distribución en Uruguay y hacia países vecinos. Su ubicación privilegiada en la Hidrovía Paraná-Paraguay lo convierte en un punto clave para el comercio fluvial y marítimo del Cono Sur, especialmente para cargas provenientes de Paraguay, Bolivia, y zonas del interior argentino y brasileño.
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